Los cambios de secuencia de los hechos introducidos en la temporada anterior han dejado esta temporada 4 de Juego de Tronos en una situación diferente a las novelas que adapta. Y muchos han llegado a temer que lleguen a romper la historia original, o hacer que ésta se resienta. Pero no es así, en mi opinión.
Juego con ventaja al decir ésto: con el retraso, ya he visto incluso el episodio 6. Y -siempre en mi opinión- D. Beniof y D.B. Weiss no sólo retoman los hilos dispersos, sino que recomponen situaciones y reconstruyen la historia con acierto, aportando cierta claridad al espectador que no conoce la enorme complejidad de la serie original. Tal vez acorten y simplifiquen los misterios y dobles juegos sin aclarar que G.R.R. Martin eterniza libro a libro, y tan bien le han funcionado, dejando que el lector elucubre sobre opciones posibles, o qué ocurrió realmente con hechos que suceden fuera del POV (punto de vista) particular de cada personaje; pero en una serie de TV con tal cantidad de protagonistas distintos y nuevos, todos complejos, tramas entrevistas pero sin concretar, y soluciones sugeridas fuera de escena, mantenerlas todas alejarían tanto al espectador que le harían perder el hilo de alguna de ellas (sé de lectores a los que le ha ocurrido, y se han dejado llevar a «ver qué ocurre» más adelante; incluso aquellos que no indagan en los blogs para descubrir elucubraciones se pierden algunas posibles opciones que añaden más misterio e interés al propio de la misma serie). Por ello pienso que los guionistas y productores (en conexión cercana con Martin, y poseedores de un conocimiento futuro que aún no tenemos el resto de los mortales), saben recomponer bien sus propios cambios y conseguir que la historia no se diluya con los recortes (necesarios, por presupuesto), sino que regrese sobre sí misma; quizás por derroteros distintos, pero no muy diferentes al original.
Tal vez, soy algo críptico en mis palabras (todo sea por hacerlo sin spoilers, aunque algún retazo se pueda escapar). Tras el avance de la Boda Roja con que culminó la temporada anterior y la guerra -que no la acción- en Poniente, y los sucesos de la Boda Púrpura del episodio anterior, los episodios han de centrarse necesariamente en las relaciones entre personaje, su desarrollo cara al espectador, o las intrigas que se suceden y no faltan en Desembarco del Rey, incluso en El Muro, o Meeren, y recomponer las secuencias. Y en este sentido, considero que los cambios realizados, las escenas y diálogos introducidos entre personajes sin POV en los libros, el acelerar la acción en algunos momentos, el adelanto de algunas secuencias que corresponden a Festín de Cuervos, incluso Danza de Dragones, sirven para clarificar sin rodeos hechos complejos al espectador. Pocas veces he disfrutado de una adaptación con momentos tan diferentes a los descritos en los libros (pero que bien podían haber estado en ellos) que sirvan para reconducir la historia hacia su mismo fin (que no final). Al menos, por ahora.
Así, considero interesante el la introducción de Oberyn Martell y Ellaria (aunque excesivo su culto al sexo como elemento diferenciador), brillante el papel otorgado a Olenna Tyrell (su conversación con Margaery) y Tywin Lannister, con sus manejo de los hilos por separado (conversaciones con Oberyn o Tommen); clarificadoras las declaraciones de Meñique y su interés por Sansa; correcta rehubicación de Jaime tras su llegada anticipada, o su relación con otros miembros de la familia, o con Bron, que jamás ocurrió, su fe en Tyrion en momentos bajos, y la lealtad de Podrick. Y resulta bien tratada la interacción de Arya con el Perro, y su evolución personal.
En RocaDragón, Stannis queda temporalmente difuminado y oscuro, falto de recursos económicos, frente a la idea de Davos sobre Braavos y su Banco de Hierro, sólo sugerida en las novelas, pero necesaria. Hermosa la visión de las pirámides de Meeren bajo la arpía, aunque algo rápida su conquista; y se sugiere un interés de Gusano Gris por Misandei, que nunca contempla Martin, ni da a entender.
Los mayores cambios se introducen alrededor de el Muro, con numerosos hechos que no aparecen en las novelas: Sam revela un secreto a Jon, que marca el ataque a los amotinados en el Torreón de Craster; llega el enviado de los Bolton en busca de Bran, heredero del título de Rey en el Norte; mientras éste, Hodor y los Green se acercan al Torreón, sin la presencia de Manosfrías.
En todo caso, la serie tiene vida propia, con hechos plausibles que bien podrían estar en las novelas, pero que Martin nunca escribió, aunque enriquecen y clarifican su historia en televisión.
Estoy disfrutando la temporada.
Rompe las Cadenas hace referencia a la llegada de Danaerys a Meeren, mientras Guardajuramentos es el nombre de la espada valyria que Jaime entrega a Brienne, cuando la envía a cumplir en su nombre la promesa que hizo a Cathelyn Stark.