Presentación oficial de CENTURIÓN. Estreno 20 de agosto.

Aurum ha remitido nota de prensa con la presentación oficial, poster definitivo y último trailer, de la película CENTURIÓN, un triller épico que promete bastante, y cuya llegada a las carteleras españolas se producirá el próximo 20 de agosto.

La película ha sido enmarcada dentro del subgénero thriller de supervivencia, o persecución épica, siguiendo la estela de El último Mohicano (1992, de Michael Mann, con Daniel Day-Lewis), o Apocalypto (2006, de Mel Gibson, con Rudy Youngblood), a las que se le intenta comparar.  Con que se acerque a la calidad que mantuvieron ambas (cada una en su estilo), me conformo.  Los diversos comentarios recibidos hasta ahora parecen alentadores, aunque esperaré a juzgar por mí mismo.

Su director es Neil Marshal, especializado hasta el momento en películas de terror y fantásticas (The Descent, Dog Soldier, Dommsday: el día del juicio), y el elenco de actores lo forman varios especializados en las de acción, algunas de grato recuerdo: Michael Fassbender (300, Malditos Bastardos), Dominic West (también 300, Hannibal: el origen del mal), o la activa (y atractiva) Olga Kurylenko (James Bond: Quantum of Solace, Hitman, Max Payne).

La historia se ambienta en la Gran Bretaña de la antigüedad, y enfrenta a las legiones romanas (o lo que queda de ellas) con los antiguos pobladores pictos (tan atractivos para R.E.Howard), en línea con otras que han proliferado durante los últimos años buscando un pretendido acercamiento «realista» al mito artúrico.  Como la adaptación de la novela La Última Legión, de Valerio Massimo Manfredi (2007, de Dough Lefler, con Colin Firth y Ben Kingsley), o esa supuesta «verdadera historia que inspiró la leyenda» de El Rey Arturo (2004,  Jerry BruckHeimer, de Antoine Fuqua, con Clive Owen y Kiera Knightley). Aunque en ambos casos la acción se desarrolla unos siglos más adelante que la historia de Centurión:

Año 117 d.C.  El Centurión Quinto Dias es el único superviviente de un feroz ataque a un fuerte fronterizo romano.  Junto a la mítica y recurrida IX Legión del general Virilo, marcha hacia el norte con la intención de aniquilar a las salvajes tribus pictas, que impiden el avance romano y causan el terror en la frontera.  Pero la legión sufre un ataque sorpresa por parte de los «salvajes» en el que Virilo es hecho prisionero, y Quinto, junto a un reducido grupo de soldados, deberá luchar de nuevo por sobrevivir tras las líneas enemigas, en una carrera frenética por evitar su captura y salvar al general.

A continuación incluyo el trailer en español, aunque hay disponible otro más reciente, que podéis descargar, en las páginas de Aurum.

Una película que parece prometer bastante, y esperemos no defraude.

Aurum presenta oficialmente a CONAN (2011)

Aurum, distribuidora en España de la nueva película de CONAN, ha dado a conocer la misma en nuestro país, con la publicación de su primer boletín y algunas imágenes (que ya conocíamos por la web), y la confirmación oficial de su estreno en 2011.

A pesar de lo indicado en post anteriores, la imagen distribuida como cabecera de la noticia me da mala espina.  Según las noticias que circulan, su director, Marcus Nispel, se decidió por Jason Momoa gracias al dominio de la espada que demostró frente a sus rivales…  Sin embargo, mi buen amigo Eugenio comenta que de las imágenes recibidas las posturas que presenta denuncian la falta de un buen Maestro de Armas… (él sí lo es, y sabe bien de lo que habla).

Si así fuera (y no hay más que fijarse en la imagen…  Además, con cara de loco y esos pelos…  ¡si parecen viborillas, más propias de El Dios del Cuenco!), mucho me temo que las coreografías de luchas y batallas, que podrían engrandecer la producción, se resientan, y con ella toda la película .  Siempre se ha dicho que segundas partes nunca fueron buenas…  La primera tampoco lo fue, pero fue una producción magnífica.

En fin, el tiempo lo dirá.  Mientras tanto, ¡recemos a Crom!

ILLIUS, de Raúl Ansola.

Atractiva y sugerente portada que engancha a primera vista, como la sinopsis, y una poco afortunada edición que provoca cierto rechazo a su lectura, en esta primera novela de Ansola, escritor y guionista que demuestra su dedicación al cine.

«Illius es el vacío, el espacio que queda desde el final de la recta de la vida hasta que se cierra el círculo de influencia del último de los invitados.  Es un terreno muerto que inevitablemente debe transitarse para que todo concluya y nada quede abierto…  En Illius viven los desesperados, los que han sufrido los peores finales o han escogido sufrirlos por adelantado».

¿Queda claro?  Para nada; pero ¿verdad que suena fúnebre, atractivo, oculto, misterioso, paranormal…?  Pues lo mismo la novela.

En Illius (de él, en latín), Raúl Ansola consigue crear en el lector un cúmulo de expectativas sorprendentes en torno al misterio de una idea maravillosa:  la aparición en una inocente foto de un paisaje en el monte, hecha tiempo atrás, de un niño que no estaba en aquel lugar en el momento en que fue hecha, y que señala con su dedo la cruz de hierro de una tumba…  sencillamente genial.   Si -además- en su inicio deja pistas de un secuestro, el misterio está creado, las expectativas servidas, y abierta la esperanza de leer una buena historia.  Si -también- los dos personajes de la obra (el resto, excepto David, se reducen a pinceladas) están bien planteados (aunque indefinidos), la cosa promete.  Pero…

Personajes bien definidos no implica necesariamente identificarse con ellos; algo que también le sucede a la obra.  La personalidad indecisa de Aurora, obsesionada por la fotografía descubierta mientras revive una ruptura que no consigue superar ni sobreponerse a ella, encuentra colofón y pareja en la de Marcos, un buen amigo, aunque distinto, algo friki y estrafalario, que sigue y estimula en su amiga el misterio (¿quién es el chico de la foto… y por qué aparece en ella si no estaba en el lugar?) y lo traslada al lector  (¿qué tiene que ver ese niño con el secuestro del inicio?)

El estilo narrativo de Raúl Ansola, atractivo y fluido en los diálogos, utiliza sin embargo en numerosas ocasiones (como hace en «La Exposición») la tercera persona del presente para describir sucesos, a veces reales, imaginados o sueños, que a mí personalmente no me convence (una sensación subjetiva que experimenté años atrás, con Zelazny, y sus «Criaturas de Luz y Tinieblas», y desde entonces no he abandonado).  Porque si en determinados momentos consigue el deseado efecto cinematográfico de cámara subjetiva que persigue a personajes y situaciones de forma incansable, por ese mismo motivo, terminas viendo la escena desde fuera y no te introduces en ella, no la vives; la historia que te cuenta se convierte en un guión que analizas, pero no sientes (un enfoque subjetivo lo veo efectivo en primera persona, como en aquellos thrillers clásicos de novela negra -llevadas al cine-, por ejemplo).  Una pena, porque el bagaje cineasta de Ansola impregna la obra, y por momentos me he sentido inmerso en una propuesta de suspense psicológico con pinceladas fantásticas, con recuerdos inconscientes al Amenábar de sus inicios; una historia que se complica entremezclando la vaguedad del misterio con sentimientos personales difusos y transmite la desazón de sus protagonistas, su falta de rumbo, su propia indefinición…

Pero si la imprecisión en la trama es una arma lícita de autor, que posibilita un final brillante cuando se explica y aclara, un final también difuso conduce a la dispersión; y una buena propuesta inicial se convierte en obra confusa.  Esa es la impresión que deja Illius tras leerlo; que en algún momento, algo se rompe en su guión.  Si un buen autor/director utiliza acertados giros -por fuertes que sean- sobre una trama bien definida, en Illius el giro es tan brusco que la historia se quiebra, los personajes se abandonan y hunden en su propia fatalidad, y la trama se desmorona y transforma en confusión.  Su última parte parece escrita por otra mente, en otro momento, bajo un punto de vista distinto; una película cortada y terminada por otro guionista y director que, además, olvida y huye de aquella propuesta inicial que hacía tan atractiva la idea, liquidada de golpe, en un instante, sin aclaración suficiente.

Hay quien dice que los finales abiertos son inteligentes porque permiten a cada uno imaginar el desenlace que mejor entiende, o varios posibles, alternativos.  No es el caso; aquí nos encontramos con un final cerrado, aunque impreciso y sin solución de continuidad, más allá de la extraña teoría de Illius que propone David, de almas descompensadas, influenciadas por hechos que sucedieron años antes… o después, en el futuro.  He leído en algún sitio que finales poco claros apuntan a la genialidad, porque te dejan con ganas de leer de nuevo la misma obra…  Me hago viejo, sin duda: pocas veces he sentido la necesidad de re-leer una novela recién acabada, ver una película dos veces seguidas, salvo que se trate de una obra de arte; o tan atractiva que desee disfrutarla bajo un nuevo enfoque, encontrar percepciones distintas a su planteamiento inicial, que lo enriquezcan; pero leerla dos veces seguidas para poder entenderla o captar su idea lo considero un atraso, habiendo tantas otras obras por leer, propuestas interesantes por descubrir…  Agradezco en cambio finales sorprendentes, pero tan lógicos que te cambian la percepción que tienes de lo anterior y te hacen revisitar los hechos bajo un prisma diferente, como en el «El Sexto sentid0», de Shyamalan, o «Los Otros» de Amenábar.  O qué decir de ese final -también de influencias pasadas- que explica todo (y lo oscurece aún más) de Stephen King en «El Resplandor», revivido por Kubrick…

De todas formas, voy a seguir a Raúl Ansola en el futuro; su idea y planteamiento me han parecido tan atractivos que quedo a la espera de nuevas propuestas, siempre que decida huir de inconcreciones o desenlaces rupturistas.  Confío en ello.  Y en que para entonces disponga de una edición mejor que la actual, pues aunque una portada sugerente complemente una idea sugestiva, su presentación recargada, sin apenas márgenes ni espacios claros, configura una página agarrotada que provoca rechazo a su lectura; y quien sabe si no contribuye a hacerla aún más confusa.

(Reseña publicada también en BEM on Line)

Nuevas fotos de CONAN (2011).

www.latinoreview.com, el portal que subió las primeras fotos de Jason Momoa como Conan ha incluido algunas más, sin demasiada calidad también, pero mucho más interesantes:

Aunque a los seguidores de la imagen Arnold/Buscema del bárbaro, hiper-musculada y sobrecargada de esteroides puede no gustar la de este Conan más joven y normal, incluso de pelo rizado, a mí me agrada y reafirma en esa imagen idílica del bárbaro que diera en su día el genial Barry Windsord Smith.

Puede que Jason Momoa, quien además maneja bastante bien la espada,  no sea lo peor de esta versión.

Si, además, el guión acompaña…

Sobre la nueva película de CONAN (2011)

Llevábamos tiempo queriendo dejar algún comentario sobre la revisión de Conan el bárbaro en cine, prevista para el año 2011.  Hasta ahora todo eran rumores acerca de personajes, actores, director…  pero últimamente parece que la cosa se concreta, tras el inicio del rodaje en Bulgaria, y la aparición de las primeras imágenes.


Esto es lo que se sabe hasta ahora.

Guión:  A cargo de Thomas Dean Donnelly y Joshua Oppenheimer.  No está del todo claro, pero parece que se han decantado por un remake del Conan de John Milius… (¡qué poca imaginación, habiendo tantas buenas obras de Howard por adaptar…!), con otro brujo malvado (Khalar Sing, en lugar de Tulsa Doom) que mata a todos menos a Conan cuando es joven.  De mayor, el bárbaro obtendrá su justa venganza.

Rumores en los foros de la web comentaron la posibilidad de adaptación de Nacerá una bruja, pero parece que no ha fructificado, o sólo se queda en el uso de alguna idea y nombre.  También que ya se trabaja en el nuevo guión para una segunda película, basada en Más allá del Río Negro (sería magnífico, si fuera cierto y adaptación de verdad, pero ya estamos acostumbrados a ideas propias y magistrales, que mejoran el original…).   Y, bueno, eso:  son sólo rumores.

Director:  Tras diversos cambios y conjeturas (John McTiernan (¡ojalá!), Brett Ratner, James McTiegue…), finalmente fue Marcus Nispel, director de La Matanza de Texas (2004),  Pathfinder (El guía del desfiladero) (2007) y Viernes 13 (2009) quien se hizo cargo del proyecto.  Este sería su tercer remake.  Según sus declaraciones, estará influenciado por los «comics violentos» del personaje, y películas como Apocalipto de Mel Gibson (si al menos tuviese la misma calidad…)

Reparto:

Conan: Tras rumores sobre Roland Kickiner (un musculitos tipo Arnold), Jared Padalecki (Sobrenatural, todo lo contrario), es Jason Momoa (Los vigilantes de la playa, Stargate Atlantis) quien encarna al nuevo Conan.  Al parecer, Marcus Nispel insistió en él, tras comprobar en el casting su espléndido dominio de la espada…  La imagen no es la de Swarzenegger, que respondía más al estereotipo del bárbaro proporcionada por Buscema o Frazetta, sino de alguien más joven (Si el guión nos presentase un Conan menos bruto que el anterior, con su pelo algo rizado podría acercarse a la que diera en su día Barry W. Smith, para mí la más inteligente; sobre todo en su última época, la guerra de Makkalet).

Conan joven:  El papel que en su día interpretó Jorge Sanz de jovencito (con Nadiuska como madre) sería para Leo Howard (Ojos de Serpierte en GI Joe).

Corin:  Aunque en un principio se le ofreció a Mickey Rourke interpretar el papel del padre del Cimmerio, será finalmente Ron Perlman (En busca del fuego, Hellboy…) quien personifique al bárbaro herrero.

Chicas Conan:  El personaje femenino de la película será la Princesa Tamara, en lugar de la Valeria/Bêlit de la película anterior; personaje que también destaca en luchas marciales y que se une a Conan frente a los malvados.  Estará interpretado por Rachel Nichols (la Scarlett de GI Joe).  También parece que Rose MacGowan, quien se postulaba como intérprete de la película de Red Sonja (ver aquí comentario al respecto) se incorporaba al rodaje, aunque no para encarnar a la pelirroja hyrcania, sino a una tal Marique.

El malo:  Khalar Sing (¿?), el malvado brujo causante de la muerte de la tribu cimmeria, y al que Conan perseguirá, será interpretado por Stephen Lang (el también malo-malísimo de Avatar).

Algunas de las escenas del rodaje, con Jason Momoa interpretando a Conan: